La hoguera más grande del mundo

Abundando en la idea de que todos somos UNO, ¿qué tal si dejamos volar nuestra imaginación y creamos una gigantesca hoguera de inmensas llamas violetas en la que todos los moradores de todos los planetas habitados puedan quemar sus pesares y sus energías de baja frecuencia?


¿Y qué mejor lugar que el Sol para llevar a cabo este gran ritual liberador?  Parece que es cada día más acuciante el afán del alma de traspasar los límites de las pequeñas fronteras particulares y de que nos vayamos haciendo a la idea, pero aplicándola a nuestra cotidianeidad, de que se está fraguando una alianza de civilizaciones. Desde estratos muy profundos de la psique colectiva, eso sí, pero si le vamos dando fuerza a esa idea, ayudaremos a que se acabe precipitando en la 3D.

¿Qué sacaremos de ello? Pues muchas cosas interesantes, por ejemplo:

La energía de fusión, que una vez que se consiga será inagotable, barata y limpia

La conciencia láser, es decir la posibilidad de alcanzar en un tiempo record nuestros objetivos

El sentimiento de pertenencia, que nos aportará serenidad y paz interior

Poder organizar un Erasmus de dimensiones cósmicas entre distintas civilizaciones, pero sin necesidad de realizar viajes temporales, sino matriciales (como muy bien explica López Guerrero en sus cursos). Es decir, hacer intercambios culturales con seres exo biológicos a través de proyecciones holográficas (como en la Guerra de las Galaxias)

¿A que suena a ciencia ficción de la muy ficticia? Pues si, pero está a la vuelta de la esquina, he tenido ocasión de comprobarlo. Pero vayamos al ritual, que es lo que todo el mundo busca en este día mágico.

- Relajación, inducción (en el apartado meditaciones del blog encontrarás estos pasos)

- Desde el templo del Mont St. Michel, sales al patio, elevas la mirada hacia arriba e imaginas que se abre una autopista de 150 millones de Km que une el Sol a la Tierra. Emites la intención de viajar al Sol  tienes la sensación de ser aspirado/a hacia el astro rey

- Aterrizas en la superficie solar, eres recibido con grandes muestras de alegría por sus habitantes, los shinies. Te conducen hacia un gigantesco cráter en el cual crepita un fuego sagrado, inmensas llamas violetas se elevan hacia el firmamento.

- Las salamandras, espíritus del fuego, se preparan para su gran noche, saben que acapararán todo el protagonismo

- En ese lugar se juntan las almas de todos los habitantes de la Tierra y de todos los demás planetas, se proyectan todos holográficamente

- Sentimos cómo responde nuestro mundo celular ante esta maravillosa confraternización, nos entran ganas de repetir el encuentro, con cualquier otro motivo.

- Emitimos unos hacia otros sentimientos de amor puro, reconociendo que formamos parte de algo mucho más grande de lo que habitualmente solemos concebir. Pero hoy estamos todos aquí con una sola intención: quemar todos nuestros residuos, nuestros pesares, todo aquello que frena nuestro pleno empoderamiento, todas las energías de baja frecuencia que nos tienen atad@s a la tercera dimensión, como si fuera con super glue 3.

- Entregamos todo ese material a las salamandras, agradeciéndoles su hermosa labor, o sea que lo tiramos todo a esa inmensa hoguera , dando las gracias a todas las circunstancias y  personas implicadas en esas vivencias, pensamientos o sentimientos

- Pedimos que todos esos contenidos sean transmutados en pura luz, la energía del Sol se encarga de ello. Imaginamos que esas partículas de luz toman la forma de un gigantesco geiser que se eleva hacia el cielo en dirección a todos los planetas mencionados, que recibirán de esta manera una lluvia de abundancia, bendiciones y de energía solar, que es la que mueve la voluntad y la conciencia

- Damos las gracias a todos los seres que han participado en este ritual, especialmente a las salamandras, e inscribimos en nuestras retinas sutiles esa imagen del geiser para que no se borre.

Feliz verbena a tod@s
Soleika Llop

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