Si no es para mí no será para nadie…

¿A que suena a culebrón venezolano? Desde luego, pero es una maldición mucho más común de lo que uno piensa, la suelen emitir de forma consciente, o no, personas que se han sentido despechadas por su pareja, éste fue el caso de Eliana. Ella decidió separarse de su marido, por razones x, y cuando aún no se había formalizado legalmente su separación, él mantuvo relaciones con otra mujer. Ese fue probablemente el momento en que Eliana emitió inconscientemente el decreto.



Tras este episodio, su ex empezó a desarrollar un fuerte sentimiento de culpa, y se forjó una curiosa alianza entre la culpa de él y la rabia de ella. Una energía oscura que se fue manifestando en sus vidas, que en el caso de ella derivó en enfermedad. A través de la puerta de la culpabilidad, la maldición se coló en la vida de su ex. El resultado fue que él empezó a buscar de forma inconsciente la compañía de mujeres que no le llenaban. Encontró su perfecto complemento, la otra parte de su alma pero una fuerza oscura (la de la alianza antes citada) le mantuvo alejado de ella porque no se creía merecedor de la felicidad.

Si, lo sé, suena a culebrón, pero se trata de casos reales que me han contado en las sesiones de  Alquimia Genética. El lector se preguntará cómo deshacer el hechizo, lo que algunas personas llaman un amarre. El primer paso consiste en cerrar la puerta a través de la cual penetran esas energías oscuras, las cuales luego se materializan y se encarnan en personas susceptibles de responder a esta vibración baja. No estamos hablando de personas pérfidas o malignas (aunque a veces sí lo son) sino que puede ser gente normal pero cuya vibración no vuela muy alto. Nos referimos a las mujeres frecuentadas por el ex de Eliana. También se da incluso en personas muy trabajadas espiritualmente pero que no se dan cuenta de que han dejado algo sin resolver en alguna experiencia similar a la de Eliana,  sea en esta vida o en otra.

Cerrar la puerta equivale a entender que no existen ni  verdugos ni  víctimas, ni  buenos ni malos, ni inocentes ni culpables, sino simplemente seres que se prestan a interpretar un rol determinado en base a nuestras necesidades kármicas. La clave, para el ex de Eliana, sería salir de los pantanos fangosos de la dualidad. El segundo paso debería consistir en agradecer al alma de Eliana todo lo que ella le ha aportado. El tercer paso lo realizó este hombre a través de la A.G. Le llevé a un espacio etérico paradisíaco (el Jardín de las Hespérides), allí se juntó con el alma de Eliana, imaginé que le rodeaban los 72 ángeles de la Cábala y le sugerí a él que pidiera ayuda a esos seres de luz para que se diluyera el hechizo. Eso fue lo que contestaron:

- Vivir estas experiencias en las que has buscado mujeres que no te han hecho feliz formaba parte de tu aprendizaje, tenías que entender lo enfadada que estaba tu fuerza femenina, la que te induce a acercarte a tu núcleo, debido al hecho de que te alejaste demasiado de ti mismo. Eliana solo se limitó a ser la portavoz de ese enfado de tu diosa por no hacerle caso y por invertir toda tu energía en las distracciones del mundo exterior. Dale las gracias por todo lo que has aprendido gracias a ella. Y agradece también a las mujeres que has tenido al lado, porque también se han prestado a vivir un rol que no ha sido muy gratificante para ellas. Ahora ya estás preparado para ser feliz.

Entonces vi como Eliana crecía y se transformaba en un inmenso ser de luz, que abría sus brazos (que parecían alas) y envolvió con ellos a su ex y a la mujer que es su perfecto complemento, bendiciendo la unión de ambos. Esto demuestra que un hechizo, amarre o maldición sólo puede ser superado con la fuerza del amor y de la comprensión.

Soleika Llop en colaboración con Tatiana Onofre



1 comentario:

Lucas dijo...

Probablemente esa fuerza del amor y de la comprensión fue debida a Hochmah, quien le inspiró al ex de Eliana tal protocolo de actuación. Besos álmicos a todos los seres de luz.

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