Lecabel 31 y Haziel 9 prestarán su sello a esta lunación impulsándonos a soltar viejos rencores bendiciendo las experiencias que sus protagonistas nos han proporcionado, entendiendo que el universo no juega a los dados repartiendo carbón por aquí y pétalos de rosa por allí, al azar. Sino que hace crecer en el jardín de cada ser las semillas que él mismo ha plantado.
¿Que no nos acordamos del momento de la siembra? Ahh, se siente –dice el GADU (gran Arquitecto del Universo)- para eso os hemos dotado de ojos y oídos, para fijaros en cada detalle y escuchar lo que la vida os susurra. ¿Qué necesitáis gafas de culo de vaso y un sonotono? Pues que pena, con la faena que me costó diseñar esos órganos…
En este mes lunar os mando un par de pinches de mi cocina celestial, uno –Haziel- os ayudará a restablecer las relaciones rotas, a superar el karma y a descubrir vuestra propia divinidad a través de la música, el canto, los juegos, el arte. Así que tocad algún instrumento. ¿Qué no tenéis ninguno? Pues fabricadlo, con utensilios de cocina, con trastos para reciclar, con cualquier cosa, no hace falta tener un Stradivarius o un steanway, sed vosotros mismos ese instrumento sublime, afinad vuestras cuerdas, que cada uno de vuestros gestos rezume armonía, arte, delicadeza, sensibilidad.
Que sepáis que ese pinche llamado Haziel pertenece a mi ejército secreto de sanadores, porque tiene su cuartel general en ese botiquín de energía curativa que es Hochmah. En esa estación de carburante repostaba aquel melenudo, aquel corazón con patas que os mandé hace 2000 años y al que tan poco caso hicisteis. Cederle una parcela de vuestra realidad, crearle una morada en la que pueda depositar su energía divina, eso espero de vosotros en este mes lunar.
El otro pinche –Lecabel- os inspirará ideas luminosas para resolver los problemas más difíciles y para saber llegar al fondo de las cosas. Os mandará la fuerza necesaria para borrar la pizarra, para olvidar los traumas y utilizarlos en todo caso como zócalo de futuras realizaciones y para saber reconocer la esencia en la forma. ¿Qué significa esto? Pues muy sencillo, se trata de saber reconocer mi huella en cada detalle, objeto, circunstancia o persona que se cruce en vuestro camino. Porque nada de lo que existe deja de tener mi huella, por muy oscuro o pringoso que sea su disfraz. Probad a quitárselo y veréis qué sorpresa os lleváis. Mi pinche Lecabel os ayudará a no quedaros aparcados en la periferia, que allí hay muchos guardias de tráfico prestos a poneros multas y a quitaros puntos del carnet.
Los movimientos del rey de los mares –Neptuno- podrían marearos un poco, mejor no olvidar tener biodramina en el botiquín, pero eso solo ocurrirá si os resistís a sus envites. El aspira a ser vuestro Cicerone por dimensiones desconocidas, os queda tanto por descubrir!! Tantos lugares lejanos, muy alejados de lo que podéis llegar a concebir jamás, pero tan cercanos a la vez , porque están a la distancia de un simple pensamiento. Enclaves de ensueño en los que vuestras almas retozarán como un párvulo al que se le permite introducir las manos en un tarro de pintura para luego posarlas sobre alguna pared. Luego podréis plasmar las energías y la luz que recojáis, en el lienzo de vuestra realidad para transformarla en una obra de arte. Eso es lo que puede aportaros el Rey del mar si abrís las puertas de la percepción.
Ouf, ya me desperté de la siesta, soñé que estaba hablando con el GADU y que me contaba un montón de cosas interesantes.
En los apasionantes blogs de mis hermanos Milena y Tristán, más cosas sobre esta lunación de Virgo.
Soleika Llop
1 comentario:
Hola. Falta hace en los tiempos actuales pasar a la experiencia el perdón y el talento resolutivo.
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