Irradiando amor con su sola presencia

Susi es una mujer muy bella, tanto por fuera como por dentro, pero puede que hasta ahora no hubiera tomado conciencia del todo de ello. Es profesora de lengua. Le propuse, en el marco de una sesión de Alquimia Genética, bucear en los archivos de su memoria celular para poder ver un momento muy poderoso de su historial. Lo hice porque sabía que su autoestima volaba a veces a ras de suelo.

Ella procuraba enseñar desde una nueva conciencia y esta actitud le había valido no pocos problemas, tanto con los alumnos como con los demás profesores y los padres de la vieja guardia, de esos que no han salido aún del parque jurásico. A través de la incursión que hicimos en su pasado, Susi se dio cuenta de la luz que había estado moviendo con sus alumnos, con su sola presencia, sin planteárselo siquiera. En la vida real también existían unas rencillas con sus hermanas, pero halló una forma de superarlas: irradiando amor desde su Cristo interior.Y empezó a valorarse mucho más y a percibir que había despertado en ella la energía del Maestro. Le costó un mar de lágrimas, pero ¿quién no se emociona cuando reencuentra a su Maestro interior? Éste fue –en parte- el diálogo que mantuvimos:


- Te colocas delante del espejo mágico, como si fueras Alicia en el País de las Maravillas y pides ver un momento muy poderoso de tu trayectoria, pasado o futuro, no importa, es la misma línea de tiempo
- Siento resistencias
- Pregunta al animal que simboliza tu mente qué puede pasar si ves estas imágenes
- Dice que puedo ser presuntuosa
- Dale las gracias por esta información, esto significa que tal vez lo hayas sido en algún momento de tu pasado pero que ahora lo estás superando
- Veo como la imagen de la Virgen María, me abraza, como si tuviera brazos muy grandes
- ¿Te quiere regalar algo?
- Me regala los brazos para abrazar y su corazón
- Pídele que te enseñe un momento culminante de su labor
- La veo abrazando a su hijo, Jesús, cuando estaba iluminando el valle
- Procura escuchar lo que él dice
- Le da las gracias a María por darle su fuerza, siente como ella le protege, y dice: “Confiad en mi luz”
- Que te enseñe una sanación que él haya realizado y que no se conozca
- Hay una pelea entre hermanos, él la está viendo, desde unos 100 m de distancia, desde su corazón y sus manos proyecta un gran chorro de luz, entonces todo cambia, dejan de discutir y ya no se acuerdan de por qué lo hacían, todo vuelve a la normalidad. Me emociono mucho porque en mis clases me ocurría lo mismo, yo estaba serena, centrada en mi y podía ver la energía conflictiva que había entre los alumnos, entre los distintos bandos, yo me quedaba mirando y se calmaba todo, yo decía que tenía que estar conectada con mi corazón siempre, porque sino las cosas no me salían bien
- Estabas actuando desde tu Yo crístico pero no tenías conciencia de ello, ahora ya la tienes y puedes valorarte mucho más.

Soleika Llop