Las doce hebras de tu ADN activadas

Comparto la meditación de la última rueda de energía que di en el Centro New Energy de Barcelona, para quienes deseen hacerla desde su casa. Las personas que participaron vivieron experiencias muy hermosas.

Meditación

- Realizas tres respiraciones lentas y profundas, entrando el aire por la nariz y exhalando por la boca, llenando primero de aire tu abdomen y luego el tórax.

- Le das la orden a tu mente de rebajar la actividad eléctrica de sus ondas a 4 ciclos por segundo, de esta forma entrarás en un estado de profunda relajación.

- Imaginas que tu mente es un animal (todos menos un halcón), imaginas que tu intuición es un halcón. Imaginas que el animal de la mente empieza a reducirse, se hace muy pequeño, tanto que puede subirse a lomos del halcón, les pides a ambos que se hagan muy amigos y le dices al halcón que se vaya volando muy lejos del lugar en el que te encuentras, para descubrirle nuevos territorios al animal de la mente.

- Creas un pasillo de luz que conecta la sala en la que te encuentras con el templo del Mont Saint Michel, te deslizas por ese pasillo a velocidades supra lumínicas, vas tan deprisa que dejas a tras tus ropas y cubres tu cuerpo con un hermoso manto blanco tejido con hilos de luz.

- Penetras en el templo, sus techos están cubiertos de amatistas incrustadas, imaginas que recibes una ducha sutil de energía violeta que penetra por tu coronilla, atraviesa tu cuerpo y sale por tus pies. A medida que esa luz va entrando notas como todo tu mundo celular se va relajando, sosegando, tranquilizando.

- Invocas a Jesús el Cristo, a la Madre María, al Arcángel Miguel, a Metatrón y a los 72 ángeles de la Cábala con el mantra Iowaaa Yavesh Ralesh, que los llama a todos juntos y les pides a todos que hagan llegar a tu conciencia solamente las imágenes que estés preparado/a para asimilar y que te sean útiles para comprender tu actual proceso.

Sinergia grupal

- (En caso de que la meditación se haga con un grupo) Imaginas que en el centro de la sala del Mont Saint Michel en la que te encuentras hay un inmenso diamante del tamaño de una cabeza humana. Imaginas que sacas un hilo dorado de tu corazón y lo enrollas alrededor del diamante, de esta forma unes tus energías a las de todas las personas del grupo.

- Eliges un guía que, de forma más cercana, te acompañará durante este viaje cuántico, Jesús, María o Miguel.

- Sales con el guía al patio del templo del Mont St Michel, miras hacia arriba, por encima del templo planea una gran ciudad de luz,  la nave Pentax. Invocas al ángel Reiyel para que despliegue su escalera de luz, subes, con el guía, y penetras en la nave. Allí eres recibido/a con grandes muestras de alegría por todos los miembros del grupo AG (Alquimia Genética) que trabajan conscientemente en este lugar, te sientes como en casa, en familia.

- Te diriges a la sala de sanaciones, invocas al Maestro Nagdayame y le pides que te haga una sanación (en este momento, los miembros del grupo AG que estén participando en la meditación y yo misma,  hacemos una imposición de manos  a los demás asistentes a la rueda de energía). Dicha sanación será distinta para cada persona, según lo que esté necesitando en este momento.

- Te trasladas a la sala de proyecciones, verás una gran pantalla panorámica y muchos sillones, te sientas en uno de ellos y pides que te muestren en la pantalla una imagen, o simplemente que llegue a tu conciencia una información del momento en que las doce hebras de tu ADN sutil estaban activadas. Verás aparecer un personaje, si es oscuro o viene vestido de oscuro o con la cabeza tapada, le das las gracias, lo despides con amor y respeto y pides que venga el personaje auténtico.

- Le preguntas qué saber hacer, qué poderes tiene, le preguntas qué mensaje tiene para ti y tomas nota.

-  Pides que los átomos sutiles de este personaje y toda la información de su código genético espiritual sean trasladados, como si fuera una transfusión, a tu genoma actual. Imaginas que te pones delante de él, se forma entre vosotros un puente de luz, como un Arco Iris, entre tu chakra 7 (coronilla) y el suyo y pides que te sea traspasada toda la información de su  ADN sutil al tuyo. Sientes como va penetrando en tu ser esta nueva energía, penetra en el núcleo de cada uno de tus átomos, impregnándolos con esta nueva luz. Sientes que te has transformado en este personaje.

- Imaginas que te trasladas a tu realidad cotidiana y empiezas a desplegar tus poderes con la gente de tu entorno, te fijas en los efectos que esto produce. Tomas nota de todo ello.

- Sales de la sala de proyecciones, sales de la nave, baja las escaleras que te conducen de nuevo al templo del Mt St Michel.

- Das las gracias a todos los seres de luz que te han ayudado en esta meditación. Cierras tus chacras,  imaginando que en cada uno de ellos hay una rosa que va cerrando poco a poco sus pétalos, sales de aquella sala, sales  del templo, bajas  aquella montañita, a medida que vas bajando, te vas desprendiendo de la túnica de luz y recuperando tu ropa. Llegas abajo, a tierra firme, estás al pie del Mont Saint Michel, desde allí imaginas que creas unas raíces etéricas que parten desde tus pies hasta el centro de la Tierra, de esta manera te anclamos. Ahora te trasladas al lugar en el que estás realizando esta meditación, encontrándote profundamente bien.

Comentarios

A veces ocurre que al preguntar por el personaje que buscamos, aparezca uno vestido de negro, de rojo, de gris o de marrón, o que tenga la cabeza tapada con un gorro, capucha, velo etc. Se trata de un impostor pero es interesante establecer un diálogo con dicho personaje para saber a qué se dedica, cuál es su función. De esta manera obtendremos una información muy interesante que nos indicará cuáles son las tendencias que están obstaculizando el poder activar las doce hebras del ADN sutil.

Evidentemente, este ejercicio no pretende ser más que una semillita que uno planta, o una “demo”  de lo que realmente seríamos capaces de hacer con las doce hebras activadas, ya que para poder gozar de los super poderes que ello supone es necesario realizar un recorrido por las doce Capas del ADN sutil, por ejemplo a través de la Alquimia Genética o de cualquier otra técnica que permita desarrollar estas capacidades.