Liberando a la “genia” de la botella

En una terapia reciente de Alquimia Genética, la persona –llamémosle Elisa- se traslada a un escenario en el marco de una Capa de su ADN relacionada con la capacidad de amar, de empatizar, de perdonar. Elisa es la persona que puse como ejemplo al hablar del umbral König Guerrero, veremos que vuelve a hacer referencia a él en el ejercicio que viene a continuación, el cual demuestra los beneficios de la Alquimia Genética.

Lo primero que le aparece en la Terapia es: “Un laboratorio con matraces y cascos de vidrio pero como abandonado, como de un pasado lejano. Todo está polvoriento, me llama la atención una botella muy limpia y pulida, dentro hay como algo etéreo”.

Parece claro que Elisa ha relegado un poco su capacidad de amar. Sin embargo hay un frasco que está muy limpio. En el transcurso de la Terapia nos olvidamos de preguntar por el significado de ese frasco pulido. Le dije a Elisa que lo hiciera a través de los ejercicios que tenía que realizar en su casa. Eso fue lo que vio (entre paréntesis, mis comentarios):

“Mi guía es Jesús. En primer lugar le pido que me lleve al laboratorio que apareció en la Terapia, para indagar sobre el contenido de la botella, que quedó pendiente. El laboratorio está en funcionamiento y la botella sigue allí. Es grande y esférica. Dentro hay algo etéreo, no visible a la vista en un principio, pero que comienza a tomar forma al concentrar en ella mi interés. Dentro hay encerrada una especie de mujer-genio, Ha estado allí recluida y la libero.

Por fiiiiiiin!!!!!!!!!!!!!! Ella es una especie de exploradora que va a lo profundo, puede ver el correspondiente etérico de la 3D (tercera dimensión), distintos aspectos de una realidad (este personaje de su psique, o de su Yo multidimensional, es el que le permite ha alcanzar el umbral KG), ve mucho más de lo aparente, me dice que puedo acudir a ella cuando me cueste entender algunas realidades de esta dimensión. Pregunto el motivo por el cual el recipiente donde ella se encontraba, estaba limpio y pulido al contrario que el resto del laboratorio, cuando entramos la primera vez. Me dice que gracias al trabajo alquímico que estoy realizando. Le doy las gracias por su ayuda y le pido disculpas por todo este tiempo de encierro. (O sea que Elisa tuvo en stand by, en estado letárgico, a esa parte de su ser capaz de explorar otras dimensiones, otros planos de conciencia).

Después comienzo la exploración de la Capa que me toca hoy, me veo entrando a través de una llama de luz a otra dimensión, por algún motivo sé que esa llama es la glándula pineal. Desde allí llego a una flor blanca de gran tamaño (ese es otro ejemplo de bio comunicación) y me sumerjo en su centro, que resulta ser otro portal que me lanza a otra dimensión, me doy cuenta de que he viajado a través de los chakras 6 y 7. Allí hay un paisaje de ensueño, pero apagado, las brumas forman cúmulos y se respira cierta tristeza y abandono (tenía abandonado este territorio de su psique). Convoco a mi pueblo celular que aparece pronto, se deslizan en el espacio sin necesidad de caminar. Enseguida me doy cuenta que son seres elevados a la vez que abandonados, aunque no hay actitud de reproche hacia mí”.