Volando detrás del globo…

El otro día, sacándole el polvo a las estanterías de mi amada biblioteca, percibí un canto que me decía “devórame otra vez, devórame otra veeez”, me fijé, y provenía del libro de Bárbara Marciniak “Los Mensajeros del Alba” , así que atendí su petición y he descubierto matices en los que tal vez no reparé hace un par de décadas, cuando lo leí por primera vez.

Por ejemplo la frase “tienen que despejarse los pasillos del Yo para poder descubrir que hay muchos yoes” alude a la toma de conciencia de nuestra multidimensionalidad. Su lectura me sugirió la imagen de un Yo muy grande, compuesto de adherencias e identificaciones y que a veces se hace tan omnipresente que nos tapa la visión de todos los yoes que yacen detrás agazapados, esperando que les abramos las puertas de la percepción. Unos yoes que tal vez tienen las alforjas muy cargadas de hermosas vivencias, y nosotros sin enterarnos.

Aprovechando las energías unificadoras de este mes lunar, a lo mejor no sería mala idea organizar una gran fiesta de reencuentro de todos esos colegas que tenemos por ahí desperdigados, para darles la oportunidad de que nos cuenten sus cuitas, y también de que nos transmitan sus potenciales. Puede que alguno haya intentado algún día asomar la patita por las ventanas de nuestra realidad inspirándonos esa afición que tanto nos gustaría practicar si tuviéramos tiempo. Si, ese Cronos al que le endosamos tantos impulsos e ilusiones frustrados. Si tuviera tiempo…cogería los pinceles e inmortalizaría retazos de realidad… Si tuviera tiempo…me apuntaría a clases de góspel…
Si tuviera tiempo…me iría a ver al Principito para que me contara las últimas noticias de su planeta, seguro que son más divertidas que en el nuestro…
Si tuviera tiempo…visitaría todas las dependencias del castillo de Hogwarts y asistiría a cada una de las clases raras que allí se imparten…
Si tuviera tiempo…me iría a tomar el té con mis amigos de las Pléyades para que me contaran qué opinan de la política saturnina de los recortes y de su impacto en la psique colectiva.

Ya estoy escuchando su respuesta:

“Podríais sustituir esa palabra (recortar) con connotaciones peyorativas por otra con mejor talante: redistribuir . Estáis llamados a proceder a una nueva distribución, a un nuevo reparto de vuestros valores energéticos, emocionales, monetarios, mentales, espirituales. Es decir, a activar partes de vuestra psique a las que hasta ahora teníais relegadas y a restar apoyo energético a otras que estaban sobrevaloradas. Imagina que dispones de una imponente mansión con un gran número de estancias que ofrecen múltiples posibilidades y que te limitas a realizar todas tus actividades cotidianas en un área específica, relegando todas las demás. ¿No te parecería absurdo?

En este caso, a lo mejor necesitarías que surgiera alguna crisis, o que empezaras a notar que te falta el aire, que te sientes enclaustrada en esa zona tan concurrida, y ello te incentivaría a explorar territorios yermos. Eso es lo que está pasando en vuestro planeta, la claustrofobia generada por las estrechas paredes de la tercera dimensión empieza a hacer mella en vosotros y os está obligando a mover ficha en el tablero, sacándoos, aunque sea a rastras, de la zonas de seguridad donde lo tenéis todo controlado, repertoriado, etiquetado, encajonado, organizado, jerarquizado, petrificado, fosilizado”. (Me doy cuenta de que me están hablando de los distintos trajes de Cronos-Saturno). Vaaaaale, cambio y corto, en otro momento seguimos con la tertulia colegas, ahora me voy a la playa a tontear con Neptuno y a jugar con las ondinas. Hay que ver para lo que da una simple frase, te agarras a ella, como un niño a un globo, y a volaaaaaaar.

Soleika Llop