Vean este interesante video que me mandó mi hermano Tristán esta mañana sobre los obstáculos que el actual sistema educativo supone de cara al desarrollo de la creatividad. Uno de los replanteamientos que nos induce a hacer el 2012 es precisamente éste: ¿cuáles son los objetivos del actual sistema educativo? ¿Fabricar clones? El alejamiento y la alienación de la propia esencia y de la creatividad que uno posee de forma natural es una de las principales causas del mal del siglo: la depresión. Si los futuros clones fueran máquinas no pasaría nada, pero resulta que tienen alma y que un día u otro ésta resurge, se manifiesta, lucha por ser reconocida. Y puede hacerlo pulsando determinadas teclas llamadas paro, enfermedad, ansiedad, ruptura, crisis etc. Antes de llegar a estos extremos, nos avisa, mediante sueños, anécdotas, sincronicidades, pero si nos hacemos los sordos…
Una manera de prevenir estos escollos es educar a nuestros hijos para que den rienda suelta a lo más sagrado que hay en ellos: su libertad de crear, de imaginar, de soñar. Tal vez debamos volver a los antiguos cuentos de hadas en vez de manipular su mente con esas horribles historietas racionales y conductistas que proliferan actualmente en los televisores y las librerías. Que disfruten con este video, que además es muy humorístico.
1 comentario:
Cuando yo era niño, mi madre nos enseñaba a rezar a todos los hermanos, cada noche, sentada a los pies de la cama.
Ya ni si quiera recuerdo si sabíamos leer. No sé de qué manera nos aprendíamos todas las oraciones de memoria, pero el caso era que no nos costaba nada, quizá porque se formaba como un pequeño grupo o mini-matriz colectiva de donde obteníamos la fuerza necesaria para grabar una cantidad ingente de información.
Visto en perspectiva, de alguna manera, mi madre nos estaba instando a estimular una determinada forma de aprendizaje-imaginación.
Recuerdo que interpelaba al Niño Jesús (hoy, con lo que sé, interpelaría a la figura del ser interno o a un guía en la TAG de Solëika) y entonces nuestra imaginación se disparaba.
A su vez, recuerdo que nos contaba todos los cuentos de hadas en otros momentos y entonces, nos imaginábamos lo inimaginable.
De modo paralelo, mi padre nos contaba cada domingo por la mañana en cama el cuento popular alemán de "Los músicos de Bremen", y otros cuentos populares pertinentes que disparaban de modo paralelo y sinérgico, nuestra imaginación.
Creo, como Solëika, que, deberían retomarse todas estas antiguas artes o formas de estimular la imaginación humana en ciernes en la infancia y como primer agente de socialización que se constituye en la familia. No por nada, sino porque, a medida que uno va profundizando en la naturaleza de la realidad personal, se va percatando que todo aquello que antes era un cuento o un mito, llega un momento en la TAG en que, era tan solo la espoleta o la punta del iceberg de todas unas creencias transcendentales aletargadas, esperando a ser despertadas.
Muchas gracias a mis padres y muchas gracias a tí también, Solëika. Por cierto, muy ilustrativo el vídeo.
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