Meditación Solsticio Junio 2010




Esta es la meditación que haremos hoy, 20 de Junio 2010, a las 12 en punto 70 personas cerca de Figueras. Quienes deseen apuntarse, aunque sea virtualmente, serán bienvenidos.

Levantamos los brazos, cruzamos las manos, giramos las palmas hacia arriba y estiramos el cuerpo todo lo que se pueda imaginando que estamos estirando los filamentos de nuestro ADN.
 Sitúate cómodamente, sin cruzar las piernas, deja que tu cuerpo se distienda, elige la postura que te sea más agradable y cómoda. Fíjate que tu ropa esté suelta, sin sujeciones. Cierra los ojos

 Realiza tres respiraciones lentas y profundas, entrando el aire por la nariz y exhalando por la boca, llenando primero de aire tu abdomen y luego el tórax

 Con una última respiración profunda, le das la orden a tu mente de rebajar la actividad eléctrica de sus ondas a 4 ciclos por segundo, de esta forma entrarás en un estado de profunda relajación.

 Imaginas que tu mente es un animal, el primero que te venga, y que ese animal está a tu lado. Lo acaricias con suavidad e imaginas que se va reduciendo hasta hacerse muy pequeñito...

 Imaginas que tu intuición es un halcón y que el animal que representa a la mente se sube a su lomo y que ambos se van volando muy lejos. Imaginas que el animal que representa a tu mente se pone muy contento porque el halcón se lo lleva a descubrir nuevos territorios.

 Ahora imagina que por encima de tu chakra 7, en la parte superior de tu cabeza, se está formando una espiral de luz azul índigo (oscuro). Observas que por encima de tu cabeza, se abre este chakra 7, tiene la forma de un gran embudo por el que penetra la luz azul de la espiral.

 Ese rayo azul inunda todo tu cuerpo armonizándolo, relajándolo completamente, aliviando todos tus centros energéticos.

 Esa luz azul va eliminando cualquier tensión y regenerando cada tejido, cada célula, cada órgano.


Inducción

 En ese estado de profunda relajación en el que te encuentras, imaginas que te trasladas al Monte Saint Michel, te encuentras al pie de este Monte, imaginas que está yermo, es todo hierba, sin construcciones, salvo un templo en la cima, dedicado al Arcángel Miguel.

 Imaginas que empiezas a escalar el Monte, lentamente y a cada paso que das, te vas desprendiendo poco a poco de todas tus vestiduras, joyas, calzado, todo lo que llevas encima. Te desprendes asimismo de una capa de energía gris compuesta de tensiones y preocupaciones de la vida diaria.

 Vas ascendiendo, subiendo, subiendo, tu cuerpo se queda completamente desnudo y cubres tu desnudez con un precioso manto blanco, tejido con hilos de luz. Alcanzas la cima del Monte, las puertas del templo se abren ante ti y te invitan a penetrar en él. Entras y te sitúas en una sala redonda con muchas ventanas por las que penetra el Sol a raudales. Las paredes y techos están cubiertos de amatistas incrustadas que despiden poderosos haces de luz de color violeta que penetran por tu cabeza, recorren todo tu cuerpo, impregnándolo de energía transmutadora.

 Creas una pirámide de luz e invocas a Jesús el Cristo, la Madre María, el Arcángel Miguel, el Arcángel Metatrón, y a los 72 ángeles de la Cábala.


Sinergia grupal

 Imaginas que en medio de la sala en la que nos encontramos hay un enorme diamante del tamaño de una cabeza humana, te ligas a él a través de un hilo dorado que sale de tu corazón.

Conexión

 Imaginamos que nos trasladamos a la ciudad de Puno en Perú, donde se encuentra el Lago Titicaca. Imaginamos que nos subimos a una barca (en compañía de los guías a los que hemos invocado) y que nos situamos a medio camino entre la isla del Sol y la de la Luna, es decir a medio camino entre Perú y Bolivia pero en medio del lago. Nos sumergimos en él y buceamos hasta el fondo.

 Accedemos a una cueva subacuática en la que hay un portal dimensional, pronunciamos tres veces Eyeh Asher Eyeh (Yo Soy el que Soy, en hebreo), para poder traspasar esta puerta. Entramos en una ciudad subterránea y lo primero que vemos son tres piscinas redondas. La primera es de perlas, nos sumergimos en ella y nos dejamos acariciar por las perlas. Es un baño de feminidad ya que las perlas son un símbolo femenino. En esta piscina diluimos el exceso de Yang, de fuerza masculina.

 Salimos de la primera piscina y nos sumergimos en la segunda, que está llena de pétalos de rosa de color rojo, es un baño de amor. Allí traemos a toda nuestra familia. Les decimos lo siguiente: “Os he traído aquí para haceros un regalo endorfínico, para que vuestra alma sienta el placer que procuran estos pétalos de rosa y el aroma que exhalan, pero también para deciros que más allá de las máscaras con las que os habéis manifestado en la presente vida, mi Yo crístico saluda, reconoce, ama y respeta a vuestro Cristo interior. Os agradezco profundamente todo lo que me habéis enseñado espero que entendáis que todos somos actores en la película de los demás y que no existen ni los culpables ni las víctimas. Os amo a todos”. Imaginamos que todos se abrazan (nosotros incluidos) formando una gran piña. En esta piscina diluimos todos los bloqueos emocionales, todos los núcleos ácidos de todos nuestros cuerpos.

 Salimos de la segunda piscina y nos sumergimos en la tercera, de aguas azules con una vibración crística. La piscina tiene un surtidor, por encima, del que sale agua azul, imaginamos que ponemos nuestra cabeza debajo del surtidor. Esa agua penetra por nuestro chakra 7 (coronilla) e introduce en nosotros un código geométrico, diferente para cada persona. Nos fijamos bien en la figura que nos llega telepáticamente. Puede ser una figura compuesta, como por ejemplo un cuadrado dentro de un círculo, o una estrella dentro de un rombo etc… Si aparecen estrellas, nos fijamos en cuántas puntas tienen.

 Imaginamos que esta figura se multiplica por el mismo número que nuestras células, imaginamos que introducimos esta figura en el núcleo de cada una de nuestras células, se trata de un código altamente sanador para nuestro cuerpo y nuestra psique.

 Salimos de la piscina nº 3, nos dirigimos hacia una gran explanada en la que hay un gigantesco árbol cuyas ramas están muy abiertas en la copa, se estrecha en el centro y cuyo tronco también estaría muy abierto, como la imagen del agujero de gusano. Imaginamos la imagen de un agujero de gusano o puente Einstein Rosen. El centro del árbol es hueco

 Dentro e ese hueco imaginamos que hay una columna dorada con reflejos anaranjados, se parece al Djed egipcio. Es un espacio en el que convergen las energías de diferentes sistemas solares, cada sistema tiene su Djed particular.

 Hacemos un llamamiento a la conciencia unitaria de todos los terrícolas y de todas las entidades exobiológicas, es decir de los habitantes de todos los demás sistemas. Todos ellos se dan cita en ese Djed o columna de luz que hemos creado con nuestra imaginación.

 Imaginamos que nos introducimos, junto con todas las energías a las que hemos llamado, en esa columna de luz que representa la unificación de las mentes de infinidad de planos de conciencia paralelos a nuestro sistema solar.
 Ese tubo de luz en el que nos encontramos es como un ascensor que empieza a bajar a una velocidad vertiginosa hacia el interior de la Tierra.

 Una vez situada en el centro de la Tierra, la columna de luz dorada/anaranjada en la que nos encontramos junto con todas las demás conciencias, sale disparada desde el centro de la Tierra en dirección al universo y va extendiendo su luz como una onda expansiva y esa luz impacta especialmente en cada uno de los planetas de nuestro sistema solar, de tal manera que los va alineando.

 Imaginamos que esa alineación se parece a un montón de donuts que se apilaran unos encima de otros y se fundieran hasta transformarse en uno solo. Todas las esferas de los planetas de nuestro sistema solar se alinean hasta que se juntan en una sola esfera.

 Ahora imaginamos que esa esfera empieza a girar hacia la derecha formando una espiral que va subiendo, una espiral de colores, con sonido y vibración. Es una espiral de ADN cósmico.

 Imaginamos que esa espiral o cadena de luz penetra en nuestro chakra 7 (coronilla) y queda instalada en nuestros cuerpos, nos transformamos así en microcuerpos de un espacio infinito. Ha quedado instalado un ADN cósmico sutil en nuestros cuerpos.

 Finalizamos esta iniciación haciendo chocar las piedras que hemos traído. Ese sonido representará el latido de nuestros corazones, unido al latido de los corazones de todos los seres del universo que han participado en la creación de ese ADN cósmico. Todos ellos oirán ese latido y se sumarán a él, multiplicándolo.

 Ese latido representa la gran unificación, interior y exterior, representa la total reestructuración de nuestro ADN cósmico

 Nos llevaremos a casa esas piedras y a cada vez que reproduzcamos ese mismo sonido con ellas, estaremos recreando esa reestructuración/reordenamiento.

 Damos las gracias a todos los seres que nos han asistido en este trabajo de luz, reabsorbemos el hilo dorado que nos ligaba al diamante, deshacemos la pirámide de luz y salimos de la sala, salimos del templo, bajamos la montañita quitándonos la túnica de luz y recuperamos nuestra ropa.

 Ya estamos al pie del Mont Saint Michel y desde allí creamos unas raíces de luz que van desde nuestros pies hasta el centro de la Tierra y volvemos al lugar en el que estábamos al principio, encontrándonos profundamente bien.

Maribel Bermúdez y Soleika Llop

1 comentario:

Anónimo dijo...

fantastica!!!!
luciana desde buenos aires

Entradas populares