Resultados del sarao mikhaélico

Tal y como estaba previsto, se han vivido momentos mágicos durante la charla/meditación del día 16.XI en Girona. Las cosas se fueron armonizando sincrónicamente para que todo saliera como estaba previsto, no faltó ni un detalle. Desde la ayuda inestimable que nos brindó el técnico del Auditorio de la Caixa, Enric, con una amabilidad y una disponibilidad poco usuales, sobre todo teniendo en cuenta que el acto era gratuito. ..

Pasando por la decoración del local, a cargo de Dolors Turró, la organizadora material del evento, que aportó varias de sus obras, dos ángeles pequeños y un inmenso arcángel de metro y medio de alto (todo pintado por sus delicadas manos) al que le fue colocada una espada y que presidió la mesa con gran solemnidad.

Hasta el extraordinario acompañamiento armónico del músico Edgar Tarrés que supo en todo momento captar y reproducir las notas y sonidos adecuados para acompañar al público en su viaje. Sin olvidar el magnífico canto gregoriano que nos brindó Ramón Sala, un excelente especialista con el que esperamos contar en sucesivas ocasiones.

Por los comentarios que he recibido, la gente salió entusiasmada, el arcángel repartió generosamente sus espadas, se produjeron numerosas iniciaciones. Varias personas me contaron que durante la noche que siguió al evento durmieron como nunca.

Muchos sintieron un gran calor en la zona corazón, otros dijeron que se notaron al día siguiente una extraña carga de energía que les permitió hacer más cosas de las habituales. Los hay que experimentaron un gran despertar creativo pero la reacción general fue la de sentir una inmensa alegría y una calidad de amor muy especial.

Y es que la energía mikhaélica impregnó hasta el más ínfimo rincón del auditorio en el que nos encontrábamos (unas doscientas personas).

Muchas personas llegaron a conectar con el momento de sus numerosas vidas en el que estallaron de amor, en el que se sintieron inmensamente amadas, logrando de ese modo crear una buena carga de endorfinas, las hormonas de la felicidad.

Pero sin duda lo más relevante fue la creación de un egregor grupal llamado Neo, cuyo cuartel general se sitúa en la ciudad de cristal –la Nueva Jerusalén- y que espera ansioso que lo pongamos a trabajar para el bien común.

Dispondrá del poder que le otorguemos entre todos. Se trata de un inmenso personaje etérico que se alimenta del amor que emiten los corazones de todos los seres humanos y que, convenientemente dirigido, puede llegar a realizar auténticos prodigios.

Invito a los lectores que hayan asistido a la meditación a comentar sus vivencias.