He podido comprobar, a través de las terapias que he realizado en estos días, algo que vimos en el análisis de la Nueva Luna pero también vino por otras varias fuentes: que la autopista crística está siendo muy transitada últimamente...En el ranking de las vivencias más sublimes y emocionantes que se pueden experimentar en el transcurso de una terapia (de Alquimia Genética) ocupa un lugar de privilegio el momento del reencuentro con el ser crístico. Este es, además, uno de los principales objetivos de mis terapias.
Y resulta especialmente impactante cuando el protagonista es un hombre, por el hecho de que aún son una minoría los que se prestan a penetrar en los meandros de su psique con casco de explorador.
En el inicio de la terapia llevo a la persona a conectar con su pueblo celular y a trabajar con las doce capas de su ADN. Cada una de ellas es como un inmenso almacén de información a través del cual se obtienen datos valiosos sobre la psique, pero también sobre el estado de las células y la salud en general. El pueblo celular aparece personificado, cada célula está personificada por un personaje. Veamos un ejemplo:
Estamos trabajando en la Capa 10 del paciente. Me dice lo siguiente:
- Los del pueblo están como despistados, no me hacen caso, pasan de mí.
-¿Por qué, qué ocurre? -le pregunto-.
- Es como si les hubiera fallado, les hice una promesa que no cumplí, les prometí un mayor bienestar pero yo les sigo obligando a trabajar muy duro. Me están señalando una montaña, en la parte más elevada del pueblo.
- Bien, sube y dime qué hay allí arriba.
- Hay una ermita, oh, Jesús está allí, esperándome con los brazos abiertos (el paciente siente una honda emoción), dice que hace mucho tiempo que me estaba esperando pero que yo no iba.
- Bien, déjate abrazar por él, ¿Tiene algún mensaje para ti?
- Me dice que haga lo mismo que él, que reparta amor y que dé salud a la gente. Me entrega una varita de cristal, dice que con esto podré sanar.
- Bien, pues baja al pueblo y toca a todos los habitantes con esta varita.
- Están muy contentos, esto es lo que querían, ahora se sienten más amorosos, dicen que es el toque crístico, dicen que han subido a otro nivel de vibración.
- Pregúntales qué les va a permitir hacer ese nuevo nivel de vibración.
- Dicen que a partir de ahora los trabajos ya no serán tan duros, ya no serán tan manuales, sino más bien emocionales, mentales o psíquicos, más de cara a la sanación.
Veamos otro ejemplo:
-Pide a los maestros (trabajamos en conexión con ángeles y arcángeles) que te permitan ver el momento más poderoso y hermoso de todas tus vidas.
-Estoy con Jesús, en una montaña muy alta. De mi cuerpo y de mis manos salen unos rayos de luz muy potentes, estoy sanando la Tierra desde lo alto y todo queda de color oro, es una luz impresionante.
-Tú eres ese ser aúrico capaz de sanar tu propia "tierra", tu realidad y también la de los demás. ¿Te das cuenta? (la paciente se emocionó mucho).
Una de estas personas, después de la terapia, superó su adicción a tomarse unas copas de más todos los días, superó también su claustrofobia así como pequeños temores que tenía cuando conducía su coche. La otra halló una gran mejoría en su estado de ánimo y descubrió nuevos poderes de sanación. Aumentó notablemente su autoestima.
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